Los años no vienen solos

Los años no vienen solos. Nunca. Siempre traen y se llevan situaciones, personas, experiencias.

Allá por el 2013 escribí esta nota sobre Alicia y el camino con corazón

En esa nota podés ver los maravillosos Mandalas que, ya en ese entonces, Alicia hacía en el taller.

Pasaron los años y ella siguió pintando y pintando y pintando...mirá lo que pasó.

Su arte creció y sigue creciendo, día a día, pincelada a pincelada.

Alicia viene al taller los Martes a la mañana. Hace unas semanas hubo una nueva incorporación al grupo. La nueva integrante cuando vio el trabajo de sus flamantes compañeras me pregunto ¿algún día yo voy a poder pintar así? 

Mi respuesta a esa pregunta siempre es la misma: con trabajo TODO se logra. TU arte está ahí, esperando a ser descubierto.

Volviendo a Alicia, cada tanto ella sale del círculo, trae nuevas ideas y juega. 

Mi trabajo es acompañarla en ese proceso, observar y orientar. Sólo eso. El resto corre por su cuenta.

A ella le apasiona investigar sobre diferentes culturas y sus tradiciones, los contextos en que vivían, las ropas que usaban, etc. Investiga, procesa y las lleva al lienzo. 

Sus obras te cuentan historias alegres, están llenas de colores vibrantes. Los niños están muy presentes en su trabajo, su obra nos deja un mensaje muy claro: 

"Los niños son el futuro, nuestro legado".

Siempre digo que cuando UNO enseña, DOS aprenden. ¡Y vaya si he aprendido de ella! de su constancia y de su amor por las culturas originarias y el arte. Alicia es una gran comunicadora.

Con los años nos hemos convertido en grandes amigas.

Como dije al principio, los años no vienen solos, afortunadamente te traen amigas y arte.

¿Querés aprender a pintar Mandalas?

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